Casa
Fractal comienza como un proyecto nuevo, y su nombre no hace alusión solo a su
exterior.
La
fractalidad ingresa a la vivienda, cambiando el paradigma establecido de los
espacios interiores ortogonales.
Aquí se
observa que con dimensiones y figuras estudiadas se logran espacios igualmente
habitables saliendo de los cánones establecidos.
Los
espacios mantienen una corriente minimalista, pero añaden un plus de calidez.
El uso de
la madera en todo su mobiliario, pisos y cielorrasos acompañado de las telas y
piedras en tonos cálidos logran un interior acogedor, que uno adopta como hogar
apenas ingresa en él, saliendo de la visión generalizada del minimalismo blanco
y despojado.
La “casa
invisible” por fuera, hace invisible los limites por dentro. Los desniveles,
ausencia de muros divisorios es una de las operaciones que logran esto.
La
continuidad en el diseño de los mobiliarios, sus gestos y materiales termina de
eliminar las fragmentaciones, logrando que cada espacio sea diferente pero
igual a la vez, ya sea un hall, dormitorio o cocina, uno sabe que se encuentra
en la misma vivienda.